
El ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha advertido de que enero está siendo, y será, un «mes duro» por los contagios de coronavirus. A pesar de ello, el ministro ha descartado un confinamiento domiciliario como el decretado el pasado mes de marzo, en el comienzo de la pandemia. «Estamos en una situación muy preocupante, viene un mes de enero muy complicado, unas semanas duras. Ya tenemos experiencia de la primera y segunda ola, hay que aplicar la estrategia ya acordada con las comunidades autónomas, también sabemos que una vez aplicadas las medidas hay que esperar un periodo de dos o tres semanas, también sabemos que hay que reducir la movilidad y los contactos», ha afirmado el ministro en la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros.Noticias relacionadas.
La incidencia acumulada en los últimos 14 días se sitúa ya en los 435,62 casos por 100.000 habitantes. A pesar de estas circunstancias, Illa ha descartado un confinamiento domiciliario: «Ya sabemos cómo hay que doblegar el crecimiento de casos, ya lo hicimos en la segunda ola, por lo que no contemplamos el confinamiento domiciliario».