
Una veintena de agricultores afectados por el proyecto de implantación de plantas fotovoltaicas en Jimena y San Roque, se están movilizando junto al ayuntamiento para presentar alegaciones ante Red Eléctrica.
«Es una tomadura de pelo, una aberración», así se muestra Juan Salido, agricultor de Castellar de la Frontera y propietario de uno de los terrenos que podrían verse afectados. «Estamos indignadísimos porque pensamos que hay muchos otros terrenos para esas subestaciones que quieren instalar en 250 hectáreas en la zona de Arenillas». «Hay trabajadores y hay edificaciones que van a tener el cable muy cerca. Creemos que hay otras alternativas porque la única riqueza y empleo que se genera en Castellar parte de la agricultura».
«Los aguacates son una lotería»
«Nosotros vivimos de los aguacates y de los cítricos que cultivamos, que ahora están amenazados», denuncia a nuestro compañero Rubén García en Herrera en Cope Campo de Gibraltar. «Son muchos agricultores afectados, es toda una vida trabajando en el campo».
De hecho el aguacate es, a juicio de Castellar, «una lotería. Se adapta muy bien a esta comarca por el microclima y esto está generando muchos puestos de trabajo. Hay que tener en cuenta que esta comarca es básicamente industrial pero también tira de la agricultura», recuerda.
«El Ayuntamiento está muy preocupado porque aunque el cable va soterrado, irá muy cerca de la población y vamos a realizar cuántas acciones legales podamos para evitar esto».