
La alternativa al carril bici ha llegado a La Línea de la Concepción de la mano de las denominadas ‘ciclocalles‘, unos viales de espacio compartido para que puedan circular bicicletas, motos, coches y todos los vehículos que pueden circular por norma general por la calzada.
Esta particular red ciclista se inicia en la calle Gibraltar hasta la frontera, y desde esa zona para la conexión con los carriles bicis existentes, al objeto de conectar con Santa Margatira, Venta Melchor y El Zabal, entre otros, por el paseo marítimo de Levante por una parte y progresivamente a través de la Avenida España con la Ronda norte, cubriéndose así todo el perímetro de la ciudad.

Según informan desde el Ayuntamiento, al igual que la mejora de la movilidad peatonal, la utilización de la bicicleta reduce la contaminación atmosférica y acústica, el consumo de
espacio para el tránsito y estacionamiento de vehículos, mejora la salud de los usuarios cotidianos de este modo de transporte y amplía la cohesión social, al tratarse de un medio de transporte económico y más accesible. Por otro lado, su mayor radio de acción frente al desplazamiento peatonal para los mismos tiempos de recorrido, mejoran asimismo las posibilidades para conectar diferentes centros importantes de atracción y generación de viajes, así como para su uso en actividades lúdico-deportivas en itinerarios de mayor longitud, haciendo accesibles áreas de interés medioambiental y/o cultural en medio de desplazamiento sostenible.
Normativa
Estrictamente, la circulación de bicicletas no precisa de infraestructuras específicas, ya que puede desarrollarse en la calzada junto al tráfico rodado, aunque las características especiales de velocidad y vulnerabilidad y el aumento creciente de la movilidad ciclista hace que en muchos casos resulte difícil de integrar en la calzada por el alto riesgo que ello supone, lo que a su vez desincentiva el uso de la bicicleta como medio habitual de desplazamiento, como movilidad activa.
Las limitaciones que presenta la red viaria actual, resulta necesario implementar medidas progresivas encaminadas a la creación de una infraestructura ciclista adecuada que permitan disponer de una red de itinerarios ciclistas ajustada a esa demanda creciente.