
La Junta de Andalucía, a través de la delegación territorial de Medio Ambiente, ha enviado al Ayuntamiento de San Roque un escrito en el que informa negativamente al proyecto presentado en su momento por la empresa Carbonell y Figueras para la instalación de 263 cabañas, cuatro albergues y zona de acampada en la Finca de Borondo, en San Roque.
El megaproyecto defendido por el alcalde, Juan Carlos Ruiz Boix, con una inversión que ronda los 120 millones de euros y que generaría unos 600 puestos de trabajo, no consigue pasar la criba de la Junta de Andalucía.
Recientemente, la Delegación Territorial de la Consejería de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul de la Junta de Andalucía un informe del Servicio de Espacios Naturales Protegidos, en el que se afirma que el proyecto turístico-urbanístico de Borondo en San Roque compromete la integridad y conservación de este espacio, que sigue perteneciendo a la Red Natural 2000 debido a la construcción de diversas edificaciones e infraestructuras.
Al seguir perteneciendo la finca de Borondo a la RN2000 -como Lugar de Importancia Comunitaria (LIC) “Área de ampliación de Los Alcornocales”-, como señala Verdemar Ecologistas en Acción, contraria también al proyecto, le es de aplicación la jurisprudencia existente, que determina que toda esta red debe clasificarse como Suelo No Urbanizable de Especial Protección.
Por su parte, el alcalde de San Roque, Juan Carlos Ruiz Boix, en una nota de prensa, confía en que la empresa Carbonell y Figueras, consiga solventar los reparos formulados por la Junta de Andalucía al proyecto.
Salvaguarda del espacio natural
El alcalde entiende que este proyecto, que actúa en tan solo un 2% de las 330 hectáreas de la finca, es el mejor que se ha podido presentar, ya que garantiza la salvaguarda de este espacio natural.
Considera el alcalde que este proyecto supondría un nuevo atractivo turístico muy importante para el municipio, así como la generación de un unos 500 puestos de trabajo tanto en su construcción como después fijos durante el funcionamiento del mismo.
Añade Ruiz Boix que «se trata de un suelo no urbanizable, de ahí que se plantee un plan especial, en un territorio que ya no forma parte del parque de los Alcornocales, pero que sí debemos preservar y cuidar».
El alcalde entiende que el proyecto presentado es un proyecto de futuro, que apuesta por la diversidad y que apuesta por la cultura de la naturaleza y la educación medioambiental.
Proyecto inicial
Por ello, el alcalde considera que el informe negativo emitido por un solo servicio de la Junta de Andalucía es subsanable, con las aportaciones de otros estamentos y entidades que han opinado sobre el proyecto, para lo que existe un plazo de 15 meses.
Por ello, Ruiz Boix entiende que en el nuevo documento, denominado expediente de evaluación ambiental estratégico completo, deben recogerse todas estas consideraciones.
En concreto, el proyecto inicial recoge la instalación de 263 cabañas, cuatro albergues y zonas de acampada. Además, se instalará un Centro de Interpretación del Parque Natural de los Alcornocales, un Centro de Interpretación del Medio Marino, una finca de explotación agroecológica, un parque de aventuras, etc.
El proyecto, de 120 millones de inversión, supondría unos 600 puestos de trabajo en su construcción, y entre 400 y 500 puestos de trabajo fijos durante su funcionamiento, pero no podrá ver la luz antes de 3 años, una vez que tenga todos los permisos de todas las administraciones.
Lamentan alcalde que el mismo departamento de la Junta de Andalucía ya intentará tumbar el proyecto de distrito equino presentado por Ayala, que fue aprobado en 2018 y recurrido por la Junta.