
Medios de comunicación alerta, prensa, radio, televisión, fieles monárquicos y una Casa Real que ya se ha trasladado a la residencia de Balmoral, donde la reina británica Isabel II se encuentra bajo supervisión médica ante su preocupante estado de salud. En definitiva, el mundo entero en vilo esperando, desgraciadamente, un mensaje concreto: ‘London Bridge is down‘ (el puente de Londres ha caído).
Premisa que activó, de inmediato, la operación London Bridge y que supondría la oficialidad del fallecimiento de la reina Isabel II. Un protocolo minuciosamente estudiado, analizado y verificado durante más de 20 años por parte de las autoridades británicas y del que tendrán que hacer uso tanto el país de la soberana como el mundo entero, tal cual se ha ensayado en decenas de ocasiones.
La operación El Puente de Londres se iniciará en el momento exacto en el que la muerte de la soberana británica se confirme. No sin antes el secretario privado de la reina, Edward Young, envíe un mensaje oficial a través de una línea de teléfono privada a la primera ministra, Liz Truss, con las palabras previamente mencionadas, «London Bridge is down».
Truss, recién nombrada primera Ministra, ordenará a su equipo a transmitir la noticia al Ministerio de Exteriores, quiénes se comunicarán a los gobiernos donde la monarca es considerada ‘Jefa de Estado’. Posteriormente, al resto de países restantes de la Mancomunidad de Naciones, la mayoría de ellos antiguas colonias británicas.
Una vez estos pasos se hayan realizado conforme a lo establecido, el resto del mundo conocerá la noticia a través de los medios de comunicación. Y es que, como curiosidad, todas las cadenas de radio comerciales en el Reino Unido cuentan con una luz obituaria de color azul, que aplicará un protocolo específico: reproducir una lista de música triste predefinida como anticipación al anuncio.
Aunque el paso más importante, la difusión del fallecimiento a través de la BBC, la cadena pública del país. Esta recibe un aviso especial, donde se emitirá a través de un sistema una secuencia ya preseleccionada de sus retratos. Acto seguido, los presentadores y reporteros deberán ponerse vestimenta negra, que refleje el luto, que tienen siempre preparada para casos como éste. En la actualidad, este 8 de septiembre, la cadena ha pausado su programación habitual para transmitir un programa especial para dar parte del estado de salud de la monarca.
Si fallece en Escocia, se activa la Operación Unicornio
Según la información aportada por el equipo médico de la Royal Family, la reina se encuentra en su residencia de Balmoral, Escocia. En caso de fallecer ahí, comenzaría la Operación Unicornio. Esta operación la llevará en tren a Londres, si es posible. Si no, la Operación Overstudy, que trasladará el féretro en avión.
La operación Unicornio consistirá en la suspensión inmediata de los trabajos en el Parlamento escocés para que las autoridades puedan preparar un funeral de estado.
¿Quién le sucede?
En el momento del fallecimiento, inmediatamente el Príncipe Carlos sucederá en el trono a Isabel II y comenzarán así los 10 días de luto oficial. Además de los preparativos para el Funeral de Estado y uno de los pasos más importantes de la historia de la monarquía británica: el adiós a la corona de Isabel y la bienvenida al nuevo rey Carlos III.
Los asuntos políticos se suspenderían y el funeral tendría lugar probablemente unos diez días después de su muerte. Se intuye que la catedral de San Giles y Holyroodhouse, en Edimburgo, serían los puntos de encuentro para los periodistas y el público